1892-2006. La "Antropología Física" en la Universidad Complutense de Madrid
María Dolores Garralda
Dpto. de Zoología y Antropología Física. Facultad de CC. Biológicas

Este libro testimonia de los primeros 50 años de nuestra Facultad de Ciencias Biológicas. Es apenas un suspiro de Tiempo en perspectiva evolutiva y, sin embargo, ha sido un período largo, fructífero e importante para esta Facultad a la que nos sentimos tan ligados, puesto que la Ciencia sobre la que voy a comentar, la "Antropología Física", estaba ya presente en la Facultad de Ciencias Naturales desde más de 60 años antes de que fuera escindida.

Mucha gente de nuestro alrededor nos dice "¡qué bonita es la Antropología!", y nosotros asentimos con entusiasmo. Pero solo nuestra vocación e interés a través de muchos años nos han permitido continuar a emocionarnos ante resultados de análisis biodemográficos o genéticos, o ante la impactante visión de cualquier fósil, por solo poner algunos ejemplos, ya que la lista de cosas que nos apasionan sería casi interminable.

En este breve trabajo vamos a resumir brevemente la Historia de nuestra Ciencia, y su ya larga vinculación con la Universidad Complutense de Madrid.

Algo de Historia.- La curiosidad es algo consustancial a los Primates, y el Hombre no es una excepción. Ese afán no se limita solo a desear conocer el medio ambiente en que vive, o los astros que observa a distancia, sino a sí mismo, en las múltiples facetas biológicas, culturales, psicológicas, etc, que tantas preguntas suscitan. Es sumamente llamativo que la escultura más antigua encontrada hasta hoy, en el yacimiento achelense de Berekhat-Ram (Israel, 300.000BP), sea la representación de una figura humana.

Casi tres millones de años de evolución del género Homo; ignoramos cuales eran las preguntas o las respuestas que las gentes se hicieron sobre sí mismas o sobre "los otros" a lo largo de esta Historia, pero lo que sí podemos imaginar, sin temor a equivocarnos, es que tanto unas como otras estarían condicionadas por los conocimientos disponibles, por el complejo mundo cultural que iban desarrollando y que condicionaba las posibles interpretaciones. La Historia del Hombre es fascinante, y asombra ver las similitudes y diferencias que, aún actualmente, se reflejan en sus culturas y comportamientos respecto a la percepción de la variación de la morfología de individuos y/o grupos.

Si nos concretamos al Mundo Occidental, más o menos clásico, para irnos centrando, hay que ascender mucho en el Tiempo para encontrar los primeros testimonios escritos sobre la variación humana en los antiguos grabados y textos egipcios, sumerios o asirios. Luego, el mundo griego con sus filósofos, historiadores y viajeros, documentó hechos y respondió de muy diversas maneras a las preguntas que los Hombres se hacían sobre sí mismos y sobre los pueblos que iban encontrando. Similares descripciones, más o menos detalladas, sobre las costumbres y apariencia física de las gentes siguieron plasmando los historiadores y viajeros romanos, medievales o incluso renacentistas. Lógicamente sólo cabía dar respuestas a la variación que se iba reseñando con los existentes conocimientos de Biología o Medicina, y fue en tiempos modernos cuando se produjo un prodigioso avance. Pero vamos a nuestro país.

El nacimiento de la Antropología Física en España está fuertemente ligado a nuestra Universidad (entonces Universidad Central), ya que en ella trabajó Pedro González de Velasco (1815-1882). Su nombramiento en 1857 como director del Museo de Anatomía le permitió ir a Paris, donde el fundador de la gran escuela antropológica francesa, Paul Broca (1824-1880) luchaba por desarrollar una disciplina que estudiara al Hombre en el contexto de lo que entonces se llamaba "Historia Natural", consiguiendo con éxito fundar la "Société d´Anthropologie de Paris" (1859, aún hoy bien activa), el "Laboratoire d´Anthropologie" (1968) y la "École d´Anthropologie" (1876). Broca no era el único a batirse por esa nueva Ciencia independiente, ya que en el Musée National des Sciences Naturelles de Paris, André de Quatrefages (1810-1892) fue nombrado (¡primer!) Profesor de Antropología Física en 1856; curiosa coincidencia: ese mismo año se descubrió en Alemania el primer Neandertal (Feldhofer 1), y J. C. Fuhlrott y H. Schaaffhausen presentaban la primera nota detallada sobre el mismo, suscitando una controversia aun persistente. Ciento cincuenta años después de esos dos hechos, asombra ver como ha evolucionado nuestra Ciencia y como está representada en el Mundo entero.

La influencia de este dinámico mundo francés, más los aires que a través de él llegaban sobre el también ambicioso y entusiasta desarrollo de la Antropología Física en Alemania o Inglaterra, debieron influir grandemente en P. González de Velasco, ya que en 1864 fundó la Sociedad Antropológica Española, con el fin de estudiar " la Historia Natural del Hombre y Ciencias afines", casi un reflejo de la Sociedad creada por P. Broca. Numerosos médicos y naturalistas participaron en los foros de discusión organizados por esta Sociedad Antropológica Española y por alguna otra afín, sirviendo de vía de difusión de las ideas darwinistas.

También la Sociedad jugó un papel importante al guardar restos humanos de diferentes épocas (casi siempre cráneos, al igual que hicieron otras Sociedades antropológicas europeas) que aparecían en las diversas excavaciones y que iban siendo analizados. La colección así formada fue la base del Museo de Antropología creado y financiado por González de Velasco en 1875; otra curiosa coincidencia: en ese mismo año M. Sanz de Sautuola descubrió la excepcional Cueva de Altamira (Santander) testimonio de la maestría artística y del complejo mundo intelectual de algunos de nuestros antepasados.

En ese mundo en efervescencia irrumpió una figura sumamente destacable por muchas razones, Manuel Antón (1849-1929), formado en la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad Central. Al completar sus estudios Antón ingresó en el Museo Nacional de Historia Natural, donde comenzó a desarrollar su interés por la Antropología Física, suscitado al leer trabajos de los tan renombrados colegas franceses y las experiencias de un viaje al Marruecos de finales del s. XIX. Ello hizo que cuando se creó, en 1883, la Sección de Antropología en el MNHN, fuera nombrado Director. Antón desarrolló los contactos con Francia, publicó numerosos trabajos de entre los que destaca "La raza de Cro-Magnon en España" (1884), y en 1885 ocupó una "Cátedra libre" de Antropología Física en el mismo Museo, lo que le permitió formar a una nueva generación de especialistas entre los que cabe destacar a Luís de Hoyos Sáinz (1860-1951), Telesforo de Aranzadi (1860-1945) y Francisco de las Barras de Aragón (1868-1955).

En 1892, M. Antón accedió a la primera Cátedra de Antropología Física creada en España, en la Facultad de Ciencias de la Universidad Central de Madrid; hace exactamente 114 años a tiempo de escribir estas líneas; a lo largo de ese período la Antropología sobrevivió a situaciones más o menos difíciles, por circunstancias diversas, destacando los nombres de dos de sus Profesores, Francisco de las Barras de Aragón y José Pérez de Barradas. Hablemos aquí de lo más positivo para nuestra Ciencia, como fue la llegada a la Cátedra (ya en la Facultad de Biología de la Universidad Complutense de Madrid) de José Pons en 1968.

Pons, formado en la Universidad de Barcelona, bajo la dirección de S. Alcobé, tenía, a la vez, una amplia visión de lo que debía ser la moderna Antropología Física, una insobornable seriedad, un admirable y respetuoso espíritu crítico, y un excelente sentido del humor. Tantos años después de haberle encontrado por primera vez, quién esto suscribe recuerda muchas de sus palabras y frases (transmitidas a mis alumnos), sus consejos, sus críticas y su constante apoyo, a la vez que testimonia del respeto con que el nombre de J. Pons era siempre considerado por numerosos colegas extranjeros.

J. Pons fue realmente "un Maestro" capaz de organizar y dirigir con eficacia el Laboratorio de Antropología Física, de formar varios alumnos durante su estancia en Madrid, alumnos que trabajaban en temas tan dispares como el crecimiento y desarrollo neonatal, biodemografía, dermatoglifos, polimorfismos sanguíneos o poblaciones prehistóricas y medievales. Él siempre supo corregir o escuchar con interés, suscitando en nosotros el esfuerzo necesario para superarnos. Desde hace muchos años varios de nosotros somos Profesores en distintas Universidades españolas, pero aún nos reconocemos como "los hijos de Pons" y recordamos con cariño nuestro período de formación con él.

La Historia siguió su curso, y, en 1973 Pons regresó a Barcelona. En la UCM la Antropología Física volvió a sobrevivir a circunstancias adversas y a diversas tormentas administrativas, pasando de ser un Departamento autónomo a formar parte del Departamento de Biología Animal I, situación mantenida hasta que en 2000 el reconocimiento de esta disciplina como área científica por el Ministerio de Educación y Ciencia, conllevó el posterior cambio de nombre, pasando a llamarse Departamento de Zoología y Antropología Física. Formamos actualmente una Unidad Docente compuesta por un Catedrático, siete Profesores Titulares, un investigador "Ramón y Cajal" y un grupo de entusiastas alumnos que preparan sus Tesis o de jóvenes Doctores que siguen vinculados.

Varios de nosotros estuvimos también en el origen y fundación (en esta misma Facultad) de la Sociedad Española de Antropología Física en 1976 (¡30 años ya!), de la "Revista Española de Antropología Física", la única especializada que existe en nuestro país, así como en la organización de numerosos Congresos, Seminarios o Cursos con participación y éxito internacionales.

Pero, ¿qué es la "Antropología Física"?.- Los manuales actuales demuestran que hay muchas definiciones al respecto, si bien es cierto que, desde sus primeros pasos como Ciencia independiente en Francia o en Alemania, y después en España, se conceptuó la "Antropología Física" como el estudio del Hombre como ser vivo, en sus medios natural y cultural, separándola claramente de otras Ciencias también englobadas en el laxo concepto del "estudio del Hombre" que implica el término griego de "Antropología".

Lo que actualmente entendemos por "Antropología Física" podría ser definido como la Ciencia que estudia la evolución biológica del Hombre y sus ancestros, así como la variabilidad de la especie humana, a través del espacio y del tiempo, analizando las causas de las mismas. Parece algo sencillo, y sin embargo define un mundo muy complejo donde entra desde la Paleoantropología, la Biodemografía, la Etología, la Genética de las Poblaciones Humanas, los Procesos de crecimiento, desarrollo o senescencia, la Biodinámica de las poblaciones de un Pasado más o menos remoto, o actuales, y un largo etc. Como los Hombres no son exclusivamente "entidades biológicas" cualquier trabajo actual de Antropología ha de realizarse con una perspectiva biocultural, es decir, conociendo lo más detalladamente posible el mundo cultural del grupo que se estudia, donde hay fuerzas críticas que dirigen las pautas comportamentales, de sistemas matrimoniales, de reproducción, o de ritos funerarios. Y otro tanto cabe decir con respecto al medio ambiente físico en el que vivieron nuestros posibles ancestros, las poblaciones pretéritas, o las actuales.

Hoy en día muchos de nuestros trabajos se realizan con estas perspectivas multidisciplinares, contando en los grupos de investigación con especialistas de muy diversa formación, y solo el conjunto de los datos así reunidos nos permite tener un conocimiento preciso del problema a analizar, más fácil cuando se trata de poblaciones actuales. Lógicamente la dificultad de conocer los datos antropológicos, o los medios ambientes físicos o culturales, se incrementa a medida que descendemos en la escala del Tiempo para descifrar la biodinámica de las poblaciones del Pasado o la búsqueda de nuestros ancestros. Pero solo estos esfuerzos holísticos nos han permitido avances tan espectaculares como la datación de los distintos yacimientos africanos donde se hallaron los Australopithecus, la reconstrucción de la dieta de estos homínidos o de los Neandertales, por solo poner algunos ejemplos. Parece que aquí dejamos de lado los estudios sobre los grandes Primates en libertad, pero ¡qué avances significaron los datos sobre la caza entre los chimpancés, o sobre la "elaboración" de bastos utensilios de piedra o de madera, o sobre las complejas relaciones sociales dentro de un grupo o entre varios de ellos!

Y, ¿qué se hace en la UCM en "Antropología Física"?.- Obviamente que una gran parte de nuestras actividades están dedicadas a la importantísima Docencia. Pero si nos referimos a Investigación, 114 años representan un largo período, y, para quienes amamos la Historia de nuestra Ciencia resulta curioso e interesante leer trabajos en orden cronológico ascendente, y ver como han cambiado temas o interpretaciones, como decíamos arriba en función de los conocimientos, así como de "las modas", ya que varias líneas de investigación respondieron, o responden, a demandas de las distintas circunstancias sociales. Vamos a resumir aquí brevemente los temas más importantes que actualmente tenemos entre manos, y sobre los cuales varios de nosotros estaremos encantados de facilitar más información.

Hay numerosos trabajos que se refieren a las Poblaciones del Pasado, abordando temas que van desde el estudio de varios yacimientos con Neandertales (algunos de ellos muy antiguos, otros de los más recientes) describiendo su morfología, analizando sus características métricas con complejos métodos estadísticos, o detalles con el MEB o los scanners, y revelando diversas patologías dentarias o traumáticas. Otros trabajos conciernen los más antiguos fósiles de los Hombres modernos en la Península Ibérica, o los de las poblaciones del fascinante período que llamamos Mesolítico y que refleja las adaptaciones biológicas y culturales de las poblaciones humanas al cambiante medio ambiente del Holoceno inicial.

Más numerosas son las investigaciones que han abordado el estudio de las poblaciones del Neolítico, Edad del Bronce, Edad del Hierro, del período llamado de las Colonizaciones, de la Hispania romana, de los grupos visigodos, o de distintas necrópolis alto y bajomedievales (cristianas y musulmanas) o modernas, puesto que el material es mucho más abundante. En esos estudios se han tenido en cuenta los datos culturales que aportaban arqueólogos e historiadores para comprender al grupo humanos cuyos restos eran analizados, y los detallados análisis han hecho avanzar considerablemente los conocimientos sobre estos temas, sobre la alimentación de aquellas gentes, sobre sus enfermedades, sobre las huellas que los â€"duros y continuos- trabajos físicos dejaban en sus esqueletos, o sobre su posible procedencia (análisis paleogenéticos, distancias).

Un aspecto inolvidable de esta especialidad de Paleoantroología es la participación de los antropólogos en diferentes excavaciones arqueológicas, donde se hallan los restos humanos. La experiencia física e intelectual de pasar muchas horas y días, junto con los arqueólogos, geólogos, paleontólogos, especialistas en dataciones, etc, descubriendo, documentando e interpretando el Pasado suscita una pasión inexplicable, y varios de nosotros hemos tenido la ocasión de vivir todo esto en yacimientos míticos como son, por ejemplo, las Cuevas de El Castillo (España) o de Qafzeh (Israel).

Otra especialidad bien desarrollada ha sido la Biodemografía, que, como estudio integral de la Demografía y la Genética de Poblaciones, pretende establecer el tipo de estructura genética desarrollada por una población, los parámetros y los mecanismos que influyen en tal desarrollo, y su variación a lo largo del tiempo. Esta estructura genética de las poblaciones humanas está parcialmente determinada por el sistema de cruzamientos existente (la constitución de parejas), el cual condiciona la procedencia de genes en cada generación. La elección de cónyuge también depende de una compleja interacción de factores entre los que cabe señalar los demográficos, socioculturales y/o geográficos, de diferente influencia sobre las comunidades humanas dependiendo del momento histórico.

En los últimos años las investigaciones se han centrado en los estudios de consanguinidad en poblaciones rurales, analizando el modelo de cruzamientos entre parientes, teniendo en cuenta factores demográficos y geográficos. Además, se publicaron varios artículos encaminados a explicar la variabilidad de los coeficientes de consanguinidad en España, así como la contribución de los diversos tipos de uniones consanguíneas al coeficiente de inbreeding, y las distintas variables socioeconómicas, geográficas y demográficas.

Otros trabajos sobre isonimia fueron pioneros en nuestro país y fructificaron en una segunda línea de investigación estrechamente relacionada con la precedente, donde se compaginó un estudio de matrices de migración con el de los coeficientes de relación por isonimia, también analizados para diferentes grupos étnicos de la época colonial en la Argentina.

Esta continuada experiencia investigadora ha permitido profundizar en el análisis de los diversos factores que pueden condicionar los modelos de elección de cónyuge en términos de parentesco biológico, llegando, mediante los análisis multivariados pertinentes, a discernir cuales son las variables a las que es más sensible el patrón de cruzamientos en las poblaciones humanas.

A finales de los años sesenta comenzó a desarrollarse una línea de trabajo relacionada con el análisis de la variabilidad genética de las poblaciones humanas. Los primeros estudios se centran en el análisis de antígenos relacionados con los sistemas de grupos sanguíneos (ABO, RH, KELL, DUFFY, KIDD, XG, etc) sobre diversas comarcas naturales de la Meseta Central, comparándose las frecuencias alélicas obtenidas con otras poblaciones españolas y europeas. El descubrimiento de nuevos marcadores polimórficos y la aplicación de técnicas electroforéticas cada vez más eficaces llevaron a la ampliación de los análisis, esta vez sobre proteínas séricas y enzimas eritrocitarias.

El desarrollo de la técnica de la PCR y la identificación de los polimorfismos de ADN han abierto nuevas y prometedoras perspectivas para el conocimiento de la variabilidad genética de nuestra especie y sus relaciones con otros primates. En la actualidad interesa el estudio directo de marcadores localizados en la cadena del ADN con la finalidad de conocer la historia evolutiva de las poblaciones humanas, mediante la comparación de los datos suministrados por el análisis genético con la información aportada por la geografía, la historia, la arqueología, la lengua o la cultura. Por ejemplo, el cromosoma Y reúne a un grupo de sistemas polimórficos que están siendo muy estudiados y constituyen un tema de plena actualidad; se aplican en el conocimiento de la diversidad humana actual y constituyen una herramienta fundamental en la identificación individual en el ámbito médico-forense. Fundamentalmente, la variación del cromosoma Y se ha abordado mediante el estudio de microsatélites o STRs (Short tandem Repeats) y polimorfismos bialélicos, en concreto, SNPs (Single Nucleotide polymorphisms). Sobre muestras obtenidas procedentes del centro y norte de España, así como de Guinea Ecuatorial, se ha analizado la variabilidad de los haplogrupos definidos por la combinación de los alelos presentes en los cromosomas, estableciéndose las relaciones entre las series analizadas y otras poblaciones del área mediterránea, siempre dentro de un marco geográfico, histórico o arqueológico.

Desde una perspectiva más aplicada, también se está estudiando la incidencia en población española de mutaciones relacionadas con alteraciones en el metabolismo del hierro, como es el caso del gen HFE, responsable de la mayoría de las hemocromatosis, o del gen de la hepcidina, así como un proyecto que intenta relacionar la genealogía y la genética mediante el estudio de varones portadores de un determinado apellido, a fin de establecer posibles linajes , mediante diversos marcadores del cromosoma Y.

Los estudios sobre Crecimiento y Desarrollo en las poblaciones humanas, también representados, permiten establecer una relación entre la condición física y la calidad de vida, en la medida en que los factores ambientales inciden sobre las características morfofisiológicas de los individuos. Las primeras investigaciones tuvieron como finalidad el establecimiento de los denominados patrones de crecimiento para la población española, aspecto de enorme interés por su utilidad para pediatras y psicólogos, en lugar de los patrones de Tanner (elaborados a partir de niños ingleses) que se estaban usando como referencia. Así, se presentaron patrones para la Comunidad de Madrid (diferenciando medio rural y urbano) para la Sierra de Gredos, e incluso para la población gitana española. El conjunto de trabajos realizados trascienden el ámbito de la Auxología y se dirigen al análisis del estado de bienestar y calidad de vida de los grupos humanos interpretando los cambios biológicos a lo largo de nuestra historia reciente como resultado de las transformaciones sociales y económicas del país. Se he demostrado que en las regiones más desarrolladas, con una amplia cantidad y variedad de alimentos, las patologías relacionadas con la malnutrición están incrementando su incidencia y, por ejemplo, el control de la obesidad se considera como uno de los principales objetivos dentro de la salud pública, llevándose a cabo campañas periódicas destinadas a su control mediante la utilización de diferentes metodologías (antropometría, bioimpedancia o excreción de creatinina) que permiten estimar aspectos como la composición corporal y la distribución del tejido graso. Dentro de la antropometría, junto a la composición corporal, el estudio de los componentes del somatotipo constituye otro campo de gran aplicabilidad, en relación con la valoración y selección de talentos deportivos y sobre el efecto que la actividad física ejerce sobre el crecimiento.

Y la Historia seguirá .- Hubiera deseado detallar más nuestras actividades o nuestros trabajos, pero creo que, como botón de muestra de lo que se hizo, o se hace, en "Antropología Física" en esta Facultad de Biología, queda aquí una clarísima prueba y refleja la complejidad de nuestra área científica; además, todos estamos dispuestos a proporcionar información precisa a quién lo desee. Las perspectivas inmediatas, al menos en lo que a investigación se refiere, son, en mi opinión, halagüeñas; al haber cambiado claramente determinadas circunstancias, ciertas líneas se están expandiendo a la par que se abren otras nuevas con fuerza y dinamismo, lo cual no puede ser más que motivo de orgullo para nosotros y para la Facultad.

El Tiempo pasa muy deprisa. Esta Facultad celebra ya sus 50 primeros años, y todos deseamos que pueda festejar el siglo, el milenio, aunque "las caras no sean las mismas". En nombre de todos nosotros, profesionales de esta más que centenaria Ciencia que es la "Antropología Física", testimonio de nuestro sincero interés y devoción por ella. Es un hecho innegable que nuestras raíces están profundamente entroncadas en la Facultad de Biología de la UCM, y en su predecesora, por lo que los antropólogos actuales, y los de futuras generaciones, no pueden sino desearle, y así lo expreso, todos los éxitos posibles.